sábado, 30 de mayo de 2009

El proceso escultórico de FUSIONADA AL MURO tiene origen en un relato vivencial. Hace ya algunos años, iniciando el actual milenio, en un viaje a Chonchi, Chiloé; conocí a una mujer que hasta hoy no ha salido de mi mente. Su nombre, Fedima del Carmen Vidal; llamada cariñosamente por sus cercanos, la Ima. Lo que se suponía sería un viaje más bien turístico, de tiempos acelerados e imágenes fragmentadas, se convirtió en una atracción profunda que me detuvo en esta anciana mujer de edad insospechada. La Ima, con sus ropas invariables, sus enormes extremidades y sus rasgos toscos, fue desde un inicio un ser atractivo, tanto por sus evidencias como por sus enigmas. Por sus propios relatos -que en un principio fueron poco comprensibles por su falta de dientes, pero a los días de acostumbrar el oído parecían tan familiares-, supe algo de su historia. Había permanecido desde muy joven, casi niña, en la casa de Juan Carlos, como empleada. Poco salió del lugar. La dificultad por la deformidad de sus pies y la incomodidad de ser sobre observada limitaron su apertura al mundo. Esto muy probablemente influyó en que se viera sin familia, quedando al cuidado de quien había sido cuidadora. Su imagen está fija en mi mente, en un presente perpetuo: A pesar de su dificultad de desplazamiento, la Ima se obstina en su autónoma rutina. Muy temprano se levanta, se vuelve a poner las faldas que se ha sacado la noche anterior y emprende su lento y dificultoso tránsito por la casa, con sus enormes pies descubiertos y un saco tejido de lana en una de sus manos. Registrando su tránsito con una mancha negra continua a baja altura, recorre su mano por el muro, mientras coordina con el avance de pies los momentos de detención para respiraciones profundas y quejidos. Avanza lentamente hacia el baño y luego a su lugar de permanencia en el día, un piso recortado en sus patas, frente a la ventana y junto a la cocina siempre encendida. Lentamente se sienta y pone sus pies dentro del saco de lana, para protegerlos del frío. Con la necesidad de hacerme de ella, pero no arrebatándola con la cámara fotográfica, me dediqué a dibujarla por horas. Era una modelo facilitadora, pues permanecía inmóvil como absorbida por su historia. De un momento a otro se acomodaba un tanto y se incorporaba. Al rato, se ensimismaba nuevamente. Al comentarle que le estaba dibujando, esbozaba una sonrisa nerviosa, que la mostraba un poco niña. El dibujarla, más que ejercicio técnico, era un gesto sensible y cariñoso de asimilación, que me conectó a ella irremediablemente.

Si bien podría pensarse en la Ima como un ser frágil y lamentoso, también proyectaba un carácter fuerte. Indudablemente guardaba vivencias duras, y su actitud se validaba en su experiencia de toda una vida. Por otro lado en momentos parecía vivir el miedo, se volvía frágil y era necesario la compañía y el afecto. Su gestualidad enfatizada por la edad, mostraban la humanidad en sus contradicciones.

Volví años después y encontré a la Ima marcadamente deteriorada por los años. Su imagen me pareció más dramática aún. Desde ese entonces no he sabido de ella. Y seguramente no he querido enterarme de su muerte. En mi imaginario necesito de ella en presente, en su encierro de autoprotección y alejamiento del mundo agresivo, en su necesidad del otro y su porfiada autonomía. Con respeto he querido referirme a esta mujer, mi querida Ima, que representa para mí la conexión con la fragilidad y la entereza, la supervivencia en un encierro que podría ser no sólo espacial sino espiritual. La imagen de la Ima me ha llevado, y seguramente, me llevará, a diversas representaciones visuales. Una de ellas es FUSIONADA AL MURO. Un tríptico de sobrerelieves de cerámica gres, que visualiza la diversidad de gestos de la Ima en su encierro y la fusión material de ella con su espacio.

Para la construcción hice un positivo de greda del rostro de la mujer anciana, al que le saqué un molde en yeso. Formé una pasta chamoteada con óxido de cobre y usé planchas de trupán y un marco de madera para hacer las superficies que representarían el muro. Luego saque copias del rostro, modifiqué la figura luego de desprenderla del molde para darle un gesto particular a cada una de las tres piezas. Luego uní el fondo al rostro, cuidando de generar agujeros de circulación de aire. Ya en estado cuero trabajé las texturas de las tres piezas, procurando la singularidad de cada una y la relación de ellas como un todo.

La mujer anciana de rasgos duros, atrapada en sus diversas expresiones dramáticas, padeciendo la humedad y el agrietamiento de su condición de soledad, en una esquina del rasposo soporte contenedor.

Este trabajo surge en el taller de cerámica de la escuela de Artes Visuales de la Universidad de Chile, guiado por la ceramista y académica Cecilia Moriamez Rivas. Formó parte de la muestra TRANSMUTACIÓN, expuesta en el Museo de Santiago Casa Colorada, del 5 al 28 junio de 2009.

miércoles, 22 de abril de 2009

JUEGO DE CONSTRUCCION DE SENTIDO

Con la intención de expresar la ambigüedad del texto y por ello su cualidad creadora, diseñé y construí significantes de diversos referentes culturales plásticos. Estos objetos tienen la posibilidad de acoplarse entre sí, formando un entramado que representa las asociaciones que se establecen al hacer una lectura. Pretendí dar un carácter referencial, como un constructo que no tiene vida en sí mismo, pero que está allí para que otros se la den, procurando la manipulación combinatoria por parte de los concurrentes, haciendo manifiesta la coautoría en el proceso de creación artística, haciendo que la obra sea modificable permanentemente. Quise potenciar la forma de juego, pues la lectura es lúdica y creativa. Además intenté acercarme a la estética del objeto industrial y seriado, propio de nuestra época, pretendiendo hacer del Juego de Construcción de Sentido un objeto deseable. El sentido experimental de este proyecto no podría pretender comprender el sentido de las combinaciones hechas con el juego. La puesta en funcionamiento de los esquemas básicos de la comunicación resultan limitados cuando se pretende comprender de qué manera se da sentido a mensaje recepcionado, o más ampliamente, cómo se le da sentido a las cosas; y más aún cuando los discursos se formulan solo con íconos plásticos. La construcción de la propuesta fue un trabajo arduo, que pasó por varias etapas y soportó modificaciones. Tuve que apelar a conocimientos propios del diseño gráfico e industrial, generar prototipos y desarrollar encuestas para seleccionar signos y definir un diseño adecuado de las piezas para que funcionara sin explicitar instrucciones. Además debí resolver las dificultades propias del material cuando se es inexperta e implementar métodos para la construcción en serie, sin las condiciones propias de la industria.
Pero una vez terminado, se disfruta ver el juego en funcionamiento; que son otros quienes se apropian de las piezas y construyen un discurso que bellamente queda en el enigma, o bien significa para cada quien singularmente.
La obra intenta esquematizar una postura crítica pero a la vez esperanzadora de la lectura, que es para mí un tema estructural, pues enmarca el trabajo creativo en general y con ello fija una ruta en mi propuesta personal.

JUEGO DE CONSTRUCCION DE SENTIDO

Material: Fibra de vidrio con resina y pintura poliuretano Año de creación: 2007

JUEGO DE CONSTRUCCIÓN DE SENTIDO surge del taller de escultura de la Escuela de Artes de la Universidad de Chile, guiado por los escultores Luis Montes Becker y Adolfo Martinez Abarca, obtuvo tercer lugar en el Concurso de Arte Joven "Cabeza de Ratón" de Museo de Artes Visuales, 2008.



... Más información en el blog JUEGO DE CONSTRUCCION DE SENTIDO

HOMBRE MAQUINA

Este ejercicio se origina de la observación e interpretación de un juguete a cuerda. Como es natural, en un inicio me puse a jugar: El pequeño pingüino movía sus patas y se movilizaba saltando luego de darle cuerda. Tras verlo repetidas veces llegué a la idea de que es un mecanismo cuyo único propósito es el goce humano. Se le concede vida para que haga una pequeña actuación ante nosotros, moviéndose frenéticamente por un rato, agonizando en un par de movimientos desincronizados y finalmente quedando congelado ridículamente en una acción truncada. Al sacarle la carcaza y analizar en detalle, descrubí lo bello de su sistema. Retiene fuerza en la cuerda, al soltarlo, la desata violentamente, poniendo en marcha una serie de engranajes que conducen al movimiento del objeto.
Mi pingüino es un tipo muy muy básico de robot. El Robot es una máquina hecha por el hombre para hacer trabajos peligrosos y cansadores, o para entretención y demostración de dominio tecnológico. El término robot proviene de la palabra checa robota, que significa servidumbre; información que reafirma la cualidad de inferioridad del robot. El desarrollar tecnología en robots humanoides es una demostración compleja de poder, que por un lado pone al hombre como creador y por otro, plantea la clasificación humana, en que los dominantes mantienen control sobre los débiles. El hombre emula a Dios, su creación es su fetiche y una demostración de poder.

Además mi pingüino era un juguete. Estaba pensado como una entretención y a la vez una premisa básica para el desarrollo de las pequeñas mentes en nuestros tiempos modernos. Esta contradicción entre la ingenuidad del juego y la problematización del poder, era atractiva. Un juguete te invita a ser un pequeño dios; puedes poner en funcionamiento la mecánica social de dominio y sometimiento. Es un postulado tremendo, oculto en un juego.

Entonces me pareció que mi tema a tratar es la Máquina como ícono del poder del hombre por sobre la naturaleza y del hombre por sobre el hombre. Por tanto era provechoso trabajar sobre otro objeto, que permite una referencia mas directa: el robot a cuerda.
Finalmente construí un objeto escultórico que pretende aunar los conceptos de máquina y hombre; en lo que podría hacer referencia al hombre sometido, simplificado a un rol mecánico y repetitivo de sumisión, en un sistema social que se basa en la interacción de dominantes y dominados.

El movimiento es generado por el espectador-activador al movilizar la manivela, causando el gesto de entregar la mano y bajar la cabeza. Para potenciar el carácter de artificialidad y rudeza de la máquina, desnudé los elementos que permiten su funcionamiento. Así también pretendí exagerar su condición de falla, generando una aparente descoordinación del movimiento y un rechinido molesto.

Es una dualidad paradojal: la máquina, como símbolo de dominio tecnológico y evolución humana, a la vez como síntoma de falla de una mecánica de poder aplastante que nos parece natural y cotidiana -ante la cual somos insensibles-; y el juguete, como entretención inofensiva pero igualmente un rudo aleccionamiento social. La obra pretende invitar lúdicamente al espectador a colocarse en el rol dominante, para de esta forma problematizar mediante una contrariedad de atracción y rechazo.


Había ciertos elementos de este objeto que me parecía debía enfatizar: Su maquinaria (cuerda, tambor, engranajes, manilla), y funcionamiento (torsión y desate) por su rudeza. Su cabeza y brazo derecho (acción racional) por sus posibilidades expresivas.

Generé varias maquetas a partir del referente inicial, intentando plasmar mi interpretación crítica acerca de las dinámicas de poder del hombre con el hombre.



HOMBRE MAQUINA


Material: Fierro soldado oxidado y concreto
Dimensiones: 1,80 x 0,6 x 0,3 mts.
Año de creación: 2006







HOMBRE MAQUINA surge en el taller de escultura de la Escuela de Artes de la Universidad de Chile, guiado por los escultores Luis Montes Becker y Adolfo Martinez Abarca. Formó parte de la exposición ESCULTURAS, en la Fac. de Ciencias Fisicas y Matemáticas de la U. Chile, 2007. La muestra reunía trabajos de compañeros de distintas generaciones del Taller de Escultura a cargo del prof. Luis Montes, de la Escuela de Artes Visuales de la misma Universidad.



HOMBRE MÁQUINA ha sido publicada en el libro "Pasarela Espagnol Terminale", Hachette Education.

 




Acá un enlace con más detalles:
http://nocionesarteeducacion.blogspot.com/2012_06_01_archive.html#4954530218921476826